La idea básica y original de este proyecto surgió en Nafarroa Oinez 2008 por la Ikastola Francisco de Jaso, quien no logró materializar la idea por falta de tiempo. El proyecto Oinez Basoa se puso en marcha con éxito en Nafarroa Oinez 2009, plantando el primer Basoa en el término municipal de Arbizu, en el invierno 2010.
En este bosque se han plantado 5.200 árboles que corresponden al Nafarroa Oinez 2009 de la Ikastola Andra Mari de Etxarri-Aranatz y 2010 de Paz de Ziganda de Villava. Este Basoa de Arbizu es ya una realidad. Los árboles están creciendo y junto a ellos, nuevos proyectos de importante valor medioambiental.
Con el fin de mejorar el hábitat existente en Sakana para los anfibios, en especial para la rana ágil (Rana dalmantina), una especie protegida, se han habilitado 2 balsas en el Oinez Basoa. El principal objetivo es incrementar la diversidad de humedales a lo largo de Sakana y favorecer la reproducción de la rana ágil, incluida en el catálogo de especies amenazadas de Navarra como especie sensible a la alteración de su hábitat.
Además se pretende poner en marcha un observatorio para aves migratorias, ya que se ha detectado que es una región de importante paso para estas especies.